Texto: Txema Mañeru.

Desde el país vecino, pero con vocación claramente internacional nos llega este joven y prometedor cantautor de apellido Schneider. Es el más joven de una familia de vocación claramente artística y fue descubierto por Jean Leloup con quien grabó un disco con la banda Last Assassins. Moviéndose entre Montreal, París y Los Ángeles contacto con el prestigioso productor francés Samy Osta (La Femme, Feu! Chatterton, Juniore). Acabalo entre Suecia y París y con la ayuda del batería Ludwing Dahlberg (Indochine, The International Noise Conspiracy) se pusieron a grabar sin parar sacando material suficientemente interesante como para distribuirlo en dos discos.

A fines del pasado año salió el E:P:, “Sorry Eyes” y este verano acaba de salir el estupendo “Eleven Songs By Aliocha” con el prestigioso sello francés Le Label que es distribuido por PIAS. Desde su sello hablan de folk-pop atemporal y de un peculiar magnetismo en su voz y en muchas de sus canciones. También hablan de baladas electrificadas, melodías psicodélicas y arreglos electrónicos o de cuerdas según la canción. Citan a grandes como Bob Dylan, Nick Drake o Elliott Smith. Todo es cierto pero también lo es que se nota que quiere crear su propia personalidad, personalidad en la que caben otras buenas y variadas influencias. Así abre con un buen y melódico single relajado titulado ‘The start’ que pudieran haber bordado los Bee Gees de los años 60. Sigue con buenas guitarras y órgano de aromas psicodélicos en ‘As good as you’. Una preciosidad lenta como ‘Jamie’ la pudieran cantar Will Oldham o Bill Callahan, pero con los arreglos electrónicos también le pegaría a Papa M o Keaton Henson. ‘Milky way’ sería un camino de rosas para los fans del más clásico Cat Stevens y cuenta con una guapa armónica. Se pone eléctrico y recuerda al primer Neil Young con dicha guitarra en ‘Crystal plane’. Finaliza con una perla acústica titulada ‘Flash in the pan’ que no creemos que sea dedicada a los excelentes Flash & The Pan australianos. De nuevo se aprecian efluvios de Bob Dylan, Cat Stevens o Don McLean. ¡En cualquier caso material más que suficiente para que sigamos a esta joven y guapa promesa!