Texto: Mikel Fernández (SurimiWorld).
Este CD autoproducido marcó el retorno a la actividad de esta banda bizkaina de rock/metal tras un silencio de casi 15 años. Formados en 1989, publicaron tres demos y un EP compartido hasta su separación en 1999. La banda se reformó en 2013 para un concierto, contando con una nueva sección rítmica y a la vista del buen rollo, juntaron temas que se habían quedado colgando en su anterior etapa con algún otro nuevo que sirvieron para dar forma a este «Arima ez da Galtzen», título más que apropiado para un CD de retorno y que lanzaron en 2015.
Es un disco totalmente autoproducido, desde el artwork a la música y que muestra las ganas con las que Kartzarot se han tomado su vuelta al ruedo, ya que desde entonces se han mantenido activos tocando a lo largo y ancho de Euskadi.
Musicalmente practican una contundente mezcla de hard rock y heavy metal. Por la voz, que me recuerda mucho a la de Blaze Bailey, se podría comparar con unos Iron Maiden endurecidos, aunque también hay ramalazos de los Metallica del Black Album, sin desdeñar la influencia de paisanos como Su Ta Gar. Es cierto que no inventan nada, pero manejan la fórmula a la perfección y han sabido componer temas potentes con estribillos pegadizos, por lo que el balance es bueno.
El disco suena de lujo. Han conseguido una producción contundente y limpia, sin que suene en absoluto artificial, sobre todo la batería. La mezcla da el justo protagonismo a cada instrumento, sin que ninguno se coma al resto. Hay temas 100% hard rockeros como Patakon o Stop Kaleratzeak, otros más heavys como Indartsuen Erosotasuna o Zazpiak Bateginik, y pegadizos como Ume Gaixoak o Sehaska Kanta. Por supuesto no falta la balada, Zure Deia Watsapean, que además sirve para cerrar el disco. Todos los temas tienen un nivelazo compositivo tremendo, no hay ninguno que sea especialmente flojo.
Es un buen disco, muestra del buen hacer musical de Kartzarot. Es lo suficientemente variado para resultar entretenido de escuchar y suena muy bien, por lo que esperemos que tenga continuidad en el futuro.