¡Gozada total la que nos ofrece este sello para los seguidores del vinilo y de los discos más clásicos de los 60 y los 70! Trabajos de sellos como Verve, Polydor, Motown, Chess, MGM, Mercury, Impulse o Capitol. Mucho rock en todas sus facetas, pero también soul, funk, jazz, rhythm and blues, disco, música brasileña, blues o folk. Comenzaron con discos clave de The Allman Brothers Band y Ike & Tina Turner. Además, Howlin’ Wolf, Muddy Waters, Caetano Veloso, Chet Baker, Donna Summer, Grand Funk Railroad, Jackson 5 o Chet Baker. Ahora suman un repóker con maestros de la música negra como The Temptations, Smokey Robinson & The Miracles y Kool & The Gang. A ellos se suman la gran Astrud Gilberto y Tim Hardin. Tienes más información en www.elemental-music.com y te recordamos que son tiradas limitadas a 1000 copias. Comenzamos por The Temptations y su, nunca mejor dicho, “Masterpiece”
The Temptations: “Masterpiece”
Su título fue muy ambicioso. Su contenido musical y literario todavía más. Cumple ahora 50 años y sigue siendo una de las obras cumbres del soul orquestal y también del concienciado en temas políticos y sociales. Norman Whitfield creó una obra maestra más que sucedía a una canción como ‘Papa Was A Rollin’ Stone’. La riqueza instrumental vestía las maravillas vocales. La obra cumbre son los 14 minutos del tema titular que tienen absolutamente de todo. En la obra trabajaron hasta 6 guitarristas y 4 bateristas. También 2 organistas y un pianista (sublime Earl Van Dyke), pero mucho ojo también con el trabajo de percusiones o la magnífica trompeta de Maurice Davis. Pero antes del tema titular, el disco se abría con otro rotundo single de éxito como fue ‘Hey Girl (I Like Your Style)’, una inquietante balada de puro soul. La segunda cara tenía joyas literarias como ‘Law Of The Land’, funk galáctico que se adelantaba a Funkadelic / Parliament con los 6 minutos de ‘Plastic Man’ y otro final lleno de riqueza y con destellos hasta psicodélicos en los más de 8 minutos de Hurry Tomorrow’. ¡Uno de los 10 mejores LPs de la historia del soul!
Smokey Robinson & The Miracles: “Going To A Go-Go”
Al igual que el “Masterpiece”, yo también incluiría este disco de los Miracles en el Top 10. Llegó al número 8 del Billboard y al número 1 en la lista de discos de R&B. No es extraño al tener un comienzo encadenando 4 singles de rotundo éxito con la variedad y la calidad de ‘The Track Of My Tears’ (mi balada favorita, por cierto), el alegre tema titular, la pegadiza ‘Ooo Baby Baby’, con sus aires doo wop y la hermosa y romántica ‘My Girl Has Gone’. Eso sin olvidar otras gemas como ‘Since You Won My Heart’, que abría la cara B o ese gran final con ‘A Fork In The Road’. El trabajo de composición conjunto entre Smokey Robinson y Warren “Pete” Moore fue impecable. Un Moore que además se encargó de los prodigiosos arreglos vocales. En otras destacadas composiciones fue también muy importante la aportación del guitarrista Marv Tarplin y la de Bobby Rogers. Luego está la gran producción de Smokey Robinson que decidió contar con The Funk Brothers, como en muchos discos de la Motown de la época, pero también con la rica The Detroit Symphony Orchestra. Lleva décadas situado en la lista con los mejores 500 LPs de la historia de Rolling Stone.
Kool & The Gang: “Live At P.L.s Hollywood California”
Fueron una de las bandas más grandes del funk de los años 70 y fueron, también, precursores de rap y hip-hop. Quizás su mejor disco fue el aclamado “Spirit Of The Boogie” del año 75. Pero ya unos años antes crearon este magnífico trabajo en directo que además viene con lujosa portada gatefold que se abre. Comentar que esta portada abierta también se repite en el también recomendable vinilo recién rescatado en la colección de Astrud Gilberto, titulado “Beach Samba” y que gozó de los impecables arreglos de Don Sebesky y Eumir Deodato, además de renombrados músicos como Ron Carter, Toots Thielemans, Marcos valle o Claudio Sion.
En estos comienzos de Kool & The Gang, además de caliente funk, teníamos también destacadas florituras de aromas jazz. Buenas joyas instrumentales con momentos realmente destacados para sus 3 músicos de viento, pero también para su destacado guitarrista y compositor Claydes Smith. Él compuso, por ejemplo, la destacada ‘Lucky For Me’. Además, algunos temas vocales realmente poderosos como el Medley ‘Ike’s Mood’ compuesto por el gigante Isaac Hayes y que abre la cara B. Le sigue otro rotundo y romántico single como es la composición de Mann, Weil y Spector, ‘You Lost That Lovin’ Feeling’. Muy buenos también los casi 7 minutos del ‘Sombrero Sam’, compuesto por Charles Lloyd, o el arranque con ‘N.T. (No Title)’, también por encima de los 6 minutos y cuya batería ha sido sampleada en destacadas canciones de Public Enemy, Niggers With Attitude (N.W.A.), Nas, Q-Tip o Blue Boy. ¡Y es que fueron unos auténticos precursores en más de un sentido!
Tim Hardin: “Tim Hardin 2”
Se sale del panorama negro de los discos anteriores esta gran reválida del año 67 de uno de los mejores artistas folk de toda la década de los 60, y por consiguiente también de la historia. Una gran pena fue su prematura desaparición a los 40 años en 1980. Por sus arreglos jazzísticos se le comparó a menudo con Tim Buckley o Janis Ian. Por su gran utilización de la melancolía y de la tristeza se le comparó, a menudo, con Nick Drake. Su sonido especial sería utilizado por genios posteriores como John Martyn. Aquí estaba su tema más popular, ‘If I Were A Carpenter’. Tema especialmente conocido e impulsado por la exitosa versión que hizo de él, Bobby Darin, aunque en el 68 también triunfaron con ella los Four Tops. Es el tema que abre este gran disco producido por Charles Koppelman y Don Rubin. Por cierto que Hardin es también compositor de la preciosa ‘Misty Roses’ presente en el LP anteriormente citado de Astrud Gilberto. Por cierto, que a mitad de los 70 volvió a resurgir un poco su prestigio por la gran versión que hizo de su ‘Reason To Believe’, un Rod Stewart que estaba en lo más alto de su carrera musical en cuanto a calidad de la misma.
Aquí teníamos otro destacado single como ‘The Lady Came From Baltimore’. Junto a ellas breves joyitas que no alcanzaban los 2 minutos de duración como ‘Baby Close Its Eyes’ o ‘You Upset The Grace Of Living When You Lie’. Sorprendente y destacado final con un ‘Tribute To Hank Williams’ cuyo título habla por sí solo. Un disco y un artista que mereció mucha mayor repercusión comercial y un trabajo que se hace muy corto y te proporciona las ganas para volverlo a pinchar, algo siempre positivo.