Elys Cöttet estrena el single ‘Maybe Tomorrow’

Elys Cottet

Elys Cöttet lleva desarrollando su composición musical durante años en distintos países (Argentina, Noruega y España), su primer trabajo fue un EP llamado “Plasticidad de una mente llena de flores”.  Además de música para su proyecto personal ha compuesto música para proyectos audiovisuales y obras de danza y tras años de estar trabajando en una compañía discográfica y llegando a conocer el entramado industrial de la música desde dentro, decide lanzar su música desde un lugar independiente dando prioridad a lo que se da de manera intuitiva y no estratégica.

Maybe Tomorrow cuenta con una procesión de guitarras eléctricas con distorsión que se complementan generando un sonido 3d con un espíritu punk y de rock indie. A las guitarras se le suma una batería profunda grabada por el baterista y productor ganador de un Grammy Latino y nominado a ocho más, Hernán Hecht, quien consigue ir hasta lo más hondo de los golpes provocando esos latidos graves como el latir de un corazón. La canción intenta transmitir la sensación de hastío y furia, y la necesidad de acabar con hechos destructivos, como la guerra, la corrupción y los abusos de poder en general, que solemos normalizar y legitimar mediante nuestros hábitos mecanizados.

La coproducción de Maybe Tomorrow fue hecha junto a Fernando Izu, productor y músico argentino. “Fer, tiene la frescura y la motivación de la juventud, las ganas de cambiar el mundo a través de la música, es un ser melómano, además de un excelente músico.”

El vídeo también mantiene un espíritu punk, crudo y visceral, refleja situaciones emocionalmente fuertes utilizando imágenes que puedes ver sentada desde tu sofá en un informativo o un documental, imágenes despojadas del envoltorio de la superproducción.  La edición que también realizó Elys Cöttet, esconde la intención de cuestionar la contemplación de los hechos a través de la inacción de una pantalla, y la de promover la acción colectiva real.

El hilo conductor del vídeo está inspirado en la mítica historieta ‘El Eternauta’, una persona que camina por las calles mientras circunferencias blancas caen a la tierra causando la muerte de todo aquel a quien tocan, una analogía con las conductas destructivas del ser humano que una a una se suceden y en conjunto causan muerte.

 

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