King Sapo: «Intentamos no hacer muchos cálculos. Tocamos desde lo que somos, con intensidad y verdad»

Texto: Mónica González

King Sapo es uno de los grupos más interesantes del momento. Recientemente han formado parte del WOP Festival bilbaíno y hemos charlado con ellos acerca de su enamoramiento con la capital vizcaína y su música.

Nueva visita a nuestra tierra, en esta ocasión en el WOP Festival aquí en Bilbao. ¿Cómo ha sido la experiencia para King Sapo?

Brutal. El público de Bilbao siempre tiene algo especial, es muy cálido, pero exigente. Se nota que aquí hay cultura de rock, de verdad. Hemos sentido que la gente venía a escuchar, a dejarse llevar y nos hace crecer y crecer muchísimo por esta zona. Además la organización ha sido de diez y un festival así, por una causa tan buena, bañado de rock… qué más podemos decir.

¿Qué hace diferente a un festival como el WOP?

Que tiene alma. No es solo música, hay un propósito detrás, una causa, y eso le da otro peso. Además, está muy bien montado, con cariño. Se nota que el público viene con esa misma energía positiva. ¡Lo pasamos en grande!

¿Cómo ha sido compartir cartel con las otras dos bandas esta noche?

Muy bien. Nos encanta cuando el festival tiene variedad, cuando no es todo lo mismo. Al final aprendemos y disfrutamos viendo a otros grupos, y también se crea ese espíritu de comunidad. Ha habido buen rollo en camerinos y eso se nota luego en el escenario. A los  Kleejos Band les conocemos de muchas ocasiones en Zaragoza y en otros escenarios. A los Bo Derek les conocíamos de oídas, pero ha sido un placer y estoy seguro de que habrá más ocasiones.

Y ya que hablamos de compartir… Vosotros, que sois cada vez más habituales en el arte de la colaboración —Tarque (M-Clan), Gabri (Shinova)… ¿cómo vivís realmente estas alianzas musicales?

Las colaboraciones molan cuando son de verdad, cuando hay conexión humana y artística. No nos gusta hacer cosas “por estrategia” o porque conviene. Si grabamos con alguien, es porque nos apetece y porque hay respeto mutuo. Claro que todo tiene su parte de negociación y equilibrio, pero eso también te enseña mucho. Es una forma de crecer, de abrir la cabeza y salir de tus propias inercias. dicho esto tenemos una gran sorpresa preparada de colaboración y creemos que por estas tierras sobre todo va a gustaros muchísimo. Hasta aquí podemos leer.

¿Cómo preparáis un concierto cuando es para un público tan variado?

Intentamos no hacer muchos cálculos. Tocamos desde lo que somos, con intensidad y verdad. Eso se transmite. Si tú crees lo que estás tocando, el público lo siente, sea del tipo que sea. Lo que sí hacemos es ajustar un poco el repertorio, elegir los temas que mejor funcionan en un festival, donde la gente viene con ganas de moverse y sentir y podemos decir muy orgullosos que está funcionando.

Vuestro sonido tiene raíces claras en el rock clásico, pero con un toque muy contemporáneo. He oído decir que lo vuestro es Grunge and Roll. ¿Qué es eso exactamente? ¿Os sentís identificados?

(Risas) Sí, eso del Grunge and Roll empezó como una coña interna, pero algo de verdad tiene. Venimos del rock clásico, de ese groove setentero o setentero… pero también marcó la crudeza de los noventas, el grunge, la honestidad sin maquillaje. Así que los noventas resumen mayormente nuestro estilo musical. Esto se traduce en energía, melodía, tripa y rock.

Al final lo que llevamos en la sangre sale por nuestros poros y eso se nota.

Hubo un momento especial en el escenario cuando hablasteis de vuestro amigo Esteban… (“Beste bat, besteban, Esteban…”) ¿Hay alguna canción que sintáis que conecta especialmente con el público en directo?

(Risas) Siempre que nos dicen eso nos acordamos de esa anécdota. Bueno, supongo que podemos decir que en el mundo del rock o de King Sapo Esteban y compañía nos tratáis maravillosamente, recibimos mucho apoyo y amor vuestro conectamos muchísimo con el público vasco.

Nos encanta tocar, y ahora estamos en un momento muy activo

¿Habéis tenido tiempo de empaparos de nuevo del ambiente bilbaíno?

Algo sí (risas). Sabemos que estamos en casa. Hemos comido como señores. Aquí no se puede comer mal y paseado y “poteando”. Nos encanta Bilbao, tiene ese equilibrio entre lo moderno y lo tradicional, y la gente es muy cercana y muy rockeros musicalmente.

Triplete en un fin de semana… ¿cómo se compagina eso con la vida mundana?

Pues con mucha cafeína y poco sueño (risas). La verdad es que nos encanta tocar, y ahora estamos en un momento muy activo. Venimos con nuevas canciones, preparando lo que será el siguiente paso del grupo. Lo de compaginarlo con la vida normal… bueno, digamos que esta es nuestra vida normal, tenemos familias comprensivas y un poco de locura necesaria para que todo encaje.

Para cerrar, ¿un mensaje para vuestros seguidores de Bilbao?

Gracias por hacernos crecer tanto y sentir tan vivos. Cada aplauso, cada mirada desde el público, nos recuerda por qué hacemos esto y nos impulsa siempre hacia adelante. Nos vemos muy pronto, porque esto sigue. Que corra la voooozz ya que sois nuestra mejor arma. El boca a boca es imparable y  la música no se trata solo de algoritmos, se trata de canciones y si te han llegado ¡misión cumplida!  ¡Aúpa Bilbao y viva el rock!

A %d blogueros les gusta esto: