Texto: Txema Mañeru.
Puede que para algunos esté siendo excesivo el número de discos en directo de los Who que nos está trayendo la gente de Universal en los últimos años. No es mi caso y lo explico. Siempre me han parecido una de las mejores bandas de la historia en directo y siguen demostrándolo todavía muy recientemente como demuestran su aún caliente paso por el Azkena o artefactos como “Live In Hyde Park” (también con sensacional y emotivo DVD de regalo), “Quadrophenia – Live In London” o “Tommy – Live At The Royal Albert Hall”. Pero es que también han recuperado momentos de gloria pretéritos como el más reciente “Isle Of Wight Festival 2004”. Y es que cada concierto suyo es único e intenso. Por eso también han recuperado conciertos mágicos de sus primeros años. Fue el caso del estupendo “Live At Hull, 1970” que tiene bastante que ver con los temas y el sonido de este anterior que aparece ahora. Ahí se recogía el concierto de la noche posterior a la grabación de su directo más icónico y uno de los más famosos de la historia del rock. Te hablamos de un sensacional “Live At Leeds” que tiene también Deluxe Edtion y hasta una caja de ensueño.
Ahora le llega el turno a “The Who Live At The Fillmore East 1968” que se edita con muchas grabaciones inéditas conmemorando el 50 Aniversario de su celebración. Ya por entonces The Who eran un grupo muy especial y potente y por eso grabaron esta actuación con la intención de que fuera su cuarto álbum tras el estupendo y divertido “Sell Out” y antes de su legendaria y primera ópera rock, “Tommy”.
Como siempre sucede en estos casos en estos últimos tiempos las canciones han sido restauradas y mezcladas con gran nivel de calidad. Corresponden a la segunda de las noches y el encargado ha sido el ingeniero de sonido Bob Pridden, que estuvo en dicho concierto. La calidad de sonido sitúa este disco entre lo mejorcito en vivo que han publicado nunca los de Townshend y Daltrey. Además tenemos la suerte de escuchar buenas piezas del “Sell Out” que, por desgracia o por tener tantas buenas y emblemáticas canciones, no volverían a tocar en directo como esas ‘Tattoo’ o una nada relajada ‘Relax’ que se va por encima de los 11 minutos, con punteos salvajes el bajo de Entwistle en rocoso primer plano. En el capítulo de versiones tenemos una primicia de la época como es ‘Fortune Teller’ y se explayaron a gusto con su adorado Eddie Cochran. Tenemos el siempre rompedor ‘Summertime Blues’, que luego sería pieza fulminante del oficial “Live At Leeds”, que supone un inicio aplastante para el concierto. Luego están encadenadas el ‘My way’ y la contagiosa ‘C’mon Everybody’. Con otro clásico del r’n’r como ‘Shakin’ All Over’ también se les va la olla para bien. Alcanza los 7 minutos y Townshend se enreda de lo lindo con sus 6 cuerdas. Además tenemos las voces pop y los coros de ‘Little Billy’. También la siempre explosiva, siempre mod y siempre contagiosa ‘I can’t explain’. Diversión con los coros de ‘Happy Jack’. En este aspecto vocal la joya es ‘A quick one (While he’s away)’ que también se va por encima de los 11 minutos. Pero claro que la guinda se la llevan en este sentido con su emblemática ‘My Generation’ que se va hasta los 33 minutos de improvisación y locura instrumental. No sé dónde se metería Daltrey, pero me río yo de las jam bands de ahora. Esto también lo inventaron los Who hace 50 años. No falta un buen libreto de 12 páginas con buenos textos de Andy Neill y un fantástico y restaurado sonido también remezclado y remasterizado. ¡Qué nos recuperen algún otro conciertazo así y con esta calidad para el año próximo!