Texto: Mikel Fernández (Surimiworld).
Pues ya tenemos entre manos el segundo disco de Alkaloid, supergrupo alemán de death metal técnico/progresivo encabezado por el batería Hannes Grossmann (ex de Obscura o Necrophagist) y el guitarrista y vocalista Morean (también en Dark Fortress o Noneuclid). Completan la banda auténticos virtuosos como Linus Klausenitzer (Obscura, Noneuclid) al bajo y los guitarristas Danny Tunker (Aborted, Prostitute Disfigurement) y Christian Müenzner (ex Obscura y Necrophagist, también en Spawn of Possession). Músicos de muchísimos quilates unidos para dar rienda suelta a una personal visión del death metal.
Tan personal es su visión que su primer álbum, The Malkuth Grimoire, fue financiado a través de un crowdfunding al que por supuesto me apunté. Aquel disco resultó un éxito y para éste Liquid Anatomy la discográfica francesa Season of Mist les ha echado el lazo. Además han aprovechado el viaje y han reeditado su debut.
El batería Hannes Grossmann se ha encargado de la grabación y producción del disco en sus propios Mordor Studios. Una vez más se nota el buen hacer del señor Grossmann, ya que ha conseguido que el disco suene perfectamente equilibrado entre la nitidez necesaria para apreciar el virtuosismo de los músicos y la crudeza necesaria que un disco de death metal necesita.
No obstante, y a pesar de que esto es un disco de death metal técnico y progresivo, es tal el talento de los músicos que forman Alkaloid que se permiten jugar con riffs propios de otros estilos, cercanos incluso al rock alternativo (el inicio de Kernel Panic, por ejemplo). Juegan también con partes sin distorsión, voces guturales y limpias, todo conjugado con muy buen gusto y sin que en ningún momento caigan en la repetición inane.
También destacan Azagtoth, que mezcla partes rápidas, pesadas y sin distorsión, además del juego de voces, que demuestra la increíble versatilidad de Morean; el tema título, que junta partes casi acústicas con otras pesadas o melódicas… Pero también hay hueco para temas más acordes a los cánones del death metal, como As Decreed by Laws Unwritten o Chaos Theory and Practice, los más pesados del disco sin duda alguna. Cierra el álbum Rise of the Cephalopods, casi 20 minutos de viaje en el que se juntan todos los ingredientes de la música de Alkaloid y que contiene muchos temas distintos dentro de sí.
Posiblemente el mejor disco de death metal técnico/progresivo del año. No hay un sólo tema que no merezca la pena, suena muy variado y entretenido. Una apuesta segura.