Texto: Mikel Fernández (SurimiWorld).
Tras varios años de espera, por fin ha llegado el nuevo álbum de los polacos Behemoth, uno de los grandes nombres de la escena metálica a día de hoy. Largo ha sido el camino desde la banda de black metal noruego que eran en sus inicios. Con la presencia incombustible de Nergal, la banda se ha asentado y la alineación que completan Orion al bajo e Inferno a la batería (más el fiel Seth a la guitarra como músico de sesión) goza ahora mismo de un estado de forma espectacular.
Por el camino queda el experimento rocanrolero de su líder Nergal, así como los discos de proyectos paralelos del resto de miembros de la banda. Así, refrescadas las fuerzas y con el paréntesis de la publicación del directo Messe Noire, Behemoth se han lanzado de lleno a presentar su nueva obra. Tratándose de una banda en constante evolución desde que abandonaron el black metal más tradicional para incluir influencias de black metal, estaba claro que este I Loved You at Your Darkest (ILYAYD a partir de ahora) iba a traer novedades en la música de Behemoth y no han defraudado.
Y es que las novedades afectan incluso al sonido de la banda. Ellos mismos se han encargado de producir el disco, contando con el apoyo de Daniel Bergstrand a la coproducción. La grabación se ha llevado a cabo a caballo entre Polonia y Estados Unidos. Saben lo que quieren, cómo lo quieren y están decididos a llevarlo a cabo.
La mayor novedad de todo esto es que el disco, en una primera escucha, tiene un aire más rockero. No es que hayan dejado de ser metal extremo, podría decirse que han hecho lo mismo que Entombed hicieron con el To Ride, Shoot Straight and Speak the Truth, solo que manteniendo mucho más firmes sus raíces y no como los suecos, que de una patada se ventilaron todo su historial death metalero en pos de un mercado más amplio que jamás llegó (de hecho Nicke Andersson se marchó para montar Hellacopters que es lo que querían ser Entombed en ese momento y tardó AÑOS en volver a tocar death metal).
Una vez más, el nivel compositivo del disco está por las nubes. Behemoth llevan en estado de gracia desde el Evangelion y con ILYAYD no han hecho sino confirmarlo. Temazos como Bartzabel conjugan la esencia del metal extremo con esa sensación rockera. Han contado con un coro de niños y con otro de adultos para reforzar los temas, además de una orquesta que interviene aquí y allá, sin prevalecer en la mezcla sobre las guitarras.
Sin ser una división estricta, el disco tiene dos tipos de temas: los más pesados, donde destacan Wolves ov Siberia, Sabbath Mater (increíble tema) o Angelus XIII, y otros que sin renunciar a la velocidad tienen un aire más rockero o atmosférico, como puedan ser God=Dog, Ecclesia Diabolica Catholica, la ya mencionada Bartzabel, If Crucifixion Was Not Enough o Havohej Pantocrator, de lo mejor del disco para mí.
Una vez más Behemoth han demostrado que están a un gran nivel y que ahora mismo todo lo que tocan reluce como el oro. Han sido capaces de darle una nueva vuelta de tuerca a su sonido introduciendo esos elementos de rock sin perder un ápice de su esencia extrema. Están donde están habiéndoselo ganado a pulso.