Dreyma, el dúo formado por Mel y Cris, nos presentan su primer disco. Un trabajo cargado de matices, luces, sombras y un aura de misterio que se transmite vía auditiva y que acompaña durante toda la grabación. Bases electrónicas, guitarras detallistas y voces que van desde lo sutil a lo extremo crean las atmósferas y ambientes que envuelven «Salvaje«. Este disco es en esencia el regreso a lo primitivo, una aproximación pura a la belleza y el dolor, el contacto material con la vida, la confrontación con la naturaleza, lo animal y lo sexual.
«Salvaje» es una obra completa y que pertenece al universo exclusivo de Dreyma, un continuum en el que no importa el principio ni el final, sino cómo recorrer el camino que invitan a transitar. Si bien este se divide en ocho temas, escucharlo a saltos supondría lo mismo que recortar un mapa en mil pedazos o que alterar el orden de las páginas de una novela sin instrucciones previas, una suerte de alegato «rayuelesco«.
Una prueba de que «Salvaje» avanza sobre el camino que empezaron a desbrozar desde su primer EP es que repitan con el productor de su último trabajo, Marcos Muñiz, quien no sólo captura la esencia de la nueva referencia, sino que comprende las sensibilidades que supone adentrarse en el mundo de Dreyma.