He aquí uno de los mejores discos de versiones de los últimos años. También uno de los más originales y, quizás, hasta esperado por su creciente número de seguidores. La reputación que se ha labrado Molly Tuttle desde sus comienzos ha sido a base de esfuerzos y buenas canciones fantásticamente interpretadas. Ahora, con esto de la pandemia y al igual que muchos otros músicos, ha tenido que seguir haciendo música de manera artesanal y en su hogar. De ahí surgió la idea de jugar con todos estos eclécticos temas favoritos con poco en común entre ellos salvo el hecho de ser canciones realmente buenas y especialmente apreciadas por Molly.
Molly es una fenómeno de la guitarra y ya ganó el premio a la mejor instrumentista del año de la Asociación de Música Americana en 2018. Luego debutó con un más que esperanzador “When You’re Ready” al año siguiente. Por su virtuosismo con la guitarra ha conseguido dos premios consecutivos a la mejor guitarrista del año de la Asociación Internacional de Música Bluegrass. Esto lo ha grabado en la pandemia y desde casa pero se ha ayudado por el cotizado guitarrista, músico de sesión y productor Tony Berg que ha trabajado con Air Suply, Bette Midler, Charlie Sexton, Neville Brothers, Squeeze, The Replacements o los estupendos Cracker más cercanos a los parámetros musicales de Molly. Junto a él se trajo a algunos cotizados músicos de sesión como Ketch Sector de los Old Crow Medicine Show. En la batería Matt Chamberlain, en los teclados Patrick Watson y en el bajo Gabe Noel. Brilla por encima de todos ellos el gran trabajo con la pedal steel guitar de Rich Hinman.
Todos juntos se enfrentan a temas como la hermosa ‘Fake Empire’, de The National, con la que se abre el disco. Luego llega la mágica canción de los Rolling Stones, ‘She’s A Rainbow’, en una mágica versión. Su voz resuena con maestría en una calmada versión de Karen Dalton y parece a punto de romperse en una frágil, pero hermosa ‘Mirrored Heart’ de FKA Twigs. ¡Vaya eclecticismo, eh! A Rancid se los merienda alegres y rítmicos llevándolos a terrenos country-folk, claro. El título del disco sale del ‘Standing On The Moon’ de los Grateful Dead con un Hinman saliéndose con la pedal steel guitar y con Taylor Goldsmith (Dawes) brillando en las voces. Ternura y ricas percusiones en el tema de Harry Styles y final mágico con Yusuf/Cat Stevens y su mágica guitarra y voz de arranque que luego deja paso a unas deliciosas cuerdas. Además versiones de Arthur Russell y Yeah Yeah Yeahs. ¡Chulo de verdad todo! Pero lo mejor es que ya está grabando un nuevo disco con canciones propias que puede salir incluso antes de que acabe este maldito año.