¡Titulo más que claro! Con portada muy divertida, por cierto. Si además, quien lo firma es Avendaño, con más de veinte años en los Siniestro Total, líder de los también imprescindibles The Bo Derek’s, y con otras buenas aventuras, más o menos en solitario; pues estamos ante una joyita que se lee con gran facilidad y con una sonrisa casi imborrable mientras lo haces.
El Prólogo lo firma su amigo, y compañero en Siniestro Total, Julián Hernández. Ya ahí nos explica que, independientemente de su temática musical y vinílica, estamos ante un libro ameno que sirve como cadena asociativa. Luego en el Prefacio es el propio Avendaño quien da su pertinente presentación. Nos dice que le ha parecido increíble que haya escrito un libro y que, evidentemente, tenía que tratar sobre música. Para J.F. León (Rock’n’roll Animal) estamos ante algo más grande que un libro sobre música, y que es una historia de superación y aprendizaje y, con mucha retranca, que te atrapa y te obliga a reflexionar sobre la vida.
300 páginas con 16 de ellas en estupendo papel satinado y con muchas fotografías más que curiosas y, mayormente, muy musicales y en las que aparece acompañado de músicos más o menos amigos. Luego están los 90 capítulos con 90 discos (3 de ellos de los Siniestro). Forman una deliciosa banda sonora de su vida. Discos que han compuesto una cartografía musical y emocional. Pudiéramos citar los nombres más populares, pero no vale la pena. Sí hay que decir que caben discos tristes, alegres, salvajes, intimistas o juerguistas. Todo ello es cierto, así como decir que han sido discos que le han acompañado en los momentos más importantes de su vida. Eso, aun reconociendo, que hay discos mejores para él y que, hasta algunos, pocos, le han dejado de gustar tanto. Como dice Avendaño, el rock’n’roll es la música perfecta para acompañar éxitos y fracasos. Por cierto, gran amplitud de miras musicales y mucha, mucha calidad. ¿Esperamos segunda parte para dentro de unos años?