Texto: Txema Mañeru.
A pesar de que su trayectoria artística ha ido claramente hacia arriba en la presente década (nominación a los Gramy incluída) parece que Beth Hart tiene una auténtica guerra interior en su mente. No se ha venido abajo por ello y lo ha volcado en algunas de las canciones más personales que haya compuesto jamás. Unas canciones que amplían sus registros estilísticos y que no tienen miedo de buscar nuevos desafíos musicales y literarios. Sigue la racha emprendida hace 3 años por “Fire On The Floor”, un disco envuelto en llamas internas también. La extensa gira dejó como fruto un magnífico DVD en directo, “From And Center: Live From NewYork”, que supera con creces el de hace unos años junto a su amigo y seguidor Joe Bonamassa. Por cierto que Bonamassa tiene ya varios discos y DVDs compartidos con ella. Entre ellos su recomendable “Black Coffee” (Provogue / Top Artist) del pasado año. Para algunos son los Ike & Tina Turner del momento y en su discográfica y otros sitios se habla de cruce entre Steve Marriott y Tina Turner. Impresionantes versiones de Etta James, Ella Fitzgerald, LaVern Baker, Howlin’ Wolf, Edgar Winter o Lucinda Williams para su disco más soul.
Pero volviendo a lo nuevo y más personal de Beth Hart diremos que su desnudez emocional ha sido total. Nos hablado en las nuevas canciones de sus amores, adicciones, familia, la recuperación de su fe religiosa y hasta de su bipolaridad. Además ha recuperado para su buena producción al prestigioso Rob Cavallo (Green Day, My Chemical Romance). Tenemos pasional, blues, mucho soul, más de algunos destellos jazz y hasta emocional góspel. Sorprenden algunos aromas disco ,a lo Donna Summer, en el más que posible single ‘Sugar Shack’.
Comienza de manera rítmica y pegadiza con su ‘Bad Woman Blues’. Deja paso a una cumbre total. Es el tema titular que comienza con aires góspel en piano y voz a lo Nina Simone, pero que luego estalla también con órgano y guitarras con las que desata sus guerras internas. Contrabajo y piano de puro jazz en la tierna y hermosa ‘Without Words In The Way’. Guapos coros góspel y crescendo al estilo de los discos cristianos de Bob Dylan en ‘Let It Grow’. Otra preciosidad absoluta es ‘Rub Me For Luck’ de la que dicen es ideal para una nueva película de James Bond. Yo también la veo un excelente punto a medio camino entre el debut de Portishead y el desgarro con la voz y el piano de Dayna Kurtz. Buenas guitarras eléctricas y majestuoso piano en un triste tema lento como ‘Woman Down’ también con cierto regusto a Nina Simone. ‘Thankful’ es ya una balada total con preponderancia para el piano y su voz que le emana desde lo más profundo de su ser. Final baladístico, solo con piano y voz, para una ‘I Need A Hero’ que reclama lo que dice su título. ¡Ahora mismo “War In My Mind” se ha convertido en mi disco favorito de esta gran y completa artista!