Texto: Txema Mañeru.
Parece algo inverosímil pero el enemigo público Nº 1 de Detroit del fin del milenio ha cumplido un cuarto de siglo de trayectoria. También se cumplen 20 años de su mejor y más legendario disco. Te hablamos de “The Shim Shady LP”. Antes de este hito histórico ya se creó unos cuantos enemigos al debutar en el 96 con “Infinite”. Ya entonces se creó su propio alter ego en forma de rapero con el nombre de Slim Shady. En el 97 llegó “The Slim Shady EP” y el fenómeno ya fue imparable. Fichó por Interscope, sello alternativo de Universal y en 1999 llegó el todavía fascinante, provocador y peligroso disco que nos ocupa.
Ahora sale por tanto “The Slim Shady LP (Expanded Edition) 20th Anniversary” (Interscope / Universal). Un disco que ya fue cuádruple platino en su país y que está cercano a las 20 millones de copias vendidas. Como viene siendo habitual con estos artefactos tenemos varios formatos. La joya de la corona es la edición en tres vinilos de 180 gramos, pero también está más que recomendable y con buen acabado y amplio libreto de 16 páginas la del doble compacto. Trae un total de 30 temas de los que 10 son bonus en forma de verdaderas rarezas.
Al seminal disco original se le suman, como ya hemos dicho, una multitud de apreciables bonus-tracks. Caben varias rarezas difíciles de localizar, temas a capella, freestyles y hasta algunos jugosos instrumentales. Es el caso de una salvaje ‘Hazardous Youth’ a capella o de una oscura ‘Bad Guys Always Die’ de la banda sonora de “Wild Wild West” con un inquietante zumbido y ritmo de fondo. 3 versiones de ‘Guilty Conscience’ entre las que me quedo con la Radio Vesión. No falta su popular ‘My Name Is’ en instrumental y ‘Just Don’t give a Fuck’ en versiones a capella e instrumental. No conviene olvidar tampoco, que para la creación de esta obra magna contó con la inestimable colaboración en la producción del popular y básico en toda historia, Dr. Dre. Junto a él los Bass Brothers y el propio Eminem que demostró tener las ideas claras, aun que peligrosas.
Eminem llevó el hip-hop a todos los públicos. Siendo blanco y añadiendo una buena dosis de melodías, además de bastantes estribillos tarareables, pronto encabezó todas las listas de ventas y popularidad. Además lo hizo manteniendo su rebeldía y su libertad en las letras de sus canciones. Insultos, amenazas de muerte, juramentos y ataques a Bush, se pasean por estas canciones. Luego está también su particular sentido del humor en algunos momentos. No ha podido mantener luego lo ofrecido aquí.
Sigue siendo una gozada escuchar singles como esa fulgurante declaración de principios y presentación titulada ‘My Name Is’ con sus indudables latidos a Beastie Boys. Buena narración y voces en ‘Guilty Conscience’ y el otro gran éxito en single fue el todavía impactante ‘Role Model’. Pero es que además ‘If I Had’ sigue siendo uno de sus mejores temas lentos y las voces de fondo de Kristie Abete Swift aumentan esa sensación. En ‘97’ Bonnie & Clyde’ juega con el tema más popular de Christopher Cross. El sampler de regusto clásico de ‘Rock Bottom’ es una gozada y también lo es el que usa por debajo delas duras soflamas de ‘As The World Turns’. En ‘Bad Meets Evil’ le acompañó Royce Da 5-9 y cierra el primer compacto un ‘Still Don’t Give A Fuck’ que mantiene su estribillo melódico genial a pesar de los reiterados “Kiss my ass”. ¡Eminem en estado puro!