Texto: Txema Mañeru
Manu es un fantástico músico, pero eminentemente de banda. Por eso nos ha sorprendido, mucho y para bien, la publicación de este gran disco, “Kosmik Street” (Sunthunder Records) a título individual. Con Los Tupper es como el gran Steve Cropper, toca las notas justas y no le gusta el protagonismo innecesario y siempre se pone al servicio de la canción. Tanto en los discos como en los conciertos más calientes.
Bien es cierto que cada vez iba cantando más y mejor en los discos de Los Tupper. Buena prueba de ello es el aún caliente y excelente “Silver Wedding” (Sunthunder Records). Ejemplos varios comenzando por el excelente y pegadizo single, con precioso videoclip, ‘Beatin’ The Blue’. Más sorprendente aún el excelente lento titulado ‘Raindrops’ que, para mí, sigue teniendo algún delicioso aroma a los Pink Floyd de mediados de los 70.
En “Kosmik Street” sigue metiendo buenos arañazos rock con su Fender pero cede más protagonismo al sonido más grave de su preciosa Jolana Cremona. Pero es que además toca el bajo y unos cuantos teclados. De hecho solo le acompaña Jesús España con la batería y percusiones, como también lo hace en Los Tupper. Eso sí hay un montón de ilustres invitados a lo largo del disco de los que te hablaremos cuando mencionemos su presencia en algunos de los temas.
El tono general de las canciones es más pop. Nunca ha ocultado su pasión por The Kinks, Beatles o George Harrison y por ahí tenemos algunos hermosos ecos a semejantes clásicos. También nos cita a Nilsson o Malcom Scarpa y yo añado a Robyn Hitchcock y sus Soft Boyes, Syd Barrett y hasta al gran Randy Newman. Pero todo a base de temas propios en inglés y con su personalidad más marcada que nunca. Se lo ha currado con calma y ha logrado un buen puñado de trabajadas canciones bien seleccionadas ya que ha descartado al menos media docena de temas que, desgraciadamente, quedarán sepultadas en el olvido. No importa, podemos disfrutar aquí de magníficas joyas como el primer single y videoclip de adelanto, ‘Moonlight Girl’, que es el tema elegido para abrir la segunda cara de la recomendable y recomendada versión en vinilo de este trabajo y que puedes conseguir en www.sunthunder.net. En el vídeo aparece Manu tocando guitarras diferentes en paisajes diferentes y con traje negro y blanco en la misma imagen. Melódica, relajada y muy psicodélica todo con acústicas. Entre ellas las de 12 cuerdas, además de mellotrón y clavicordio. Según Manu es uno de los temas que mejor representa el espíritu global del disco. Tiene un gran estribillo melódico y a mí me h atraído a la mente a Robyn Hitchcock y a The Steppes. Recuerda también a su amigo perdido, Dave Kusworth, sí. También a Sudden en sus momentos más relajados. Estaría orgulloso de Manu si la oyera. Pese a las muertes, aún cercanas en el tiempo de Kusworth, Kevin Junior y Darrell Bath, Manu quiere mantener vivo ese romanticismo “Jacobites” y lo logra.
Lo hace desde el inicio del disco con ‘New Rising Sun’ y su melodía deliciosa y cuidados arreglos al estilo del pop costumbrista de los Kinks, aunque también es un tema que pudiera haber entrado en los últimos discos de Los Tupper. ‘Blessing In Disguise’ es más contagioso aún e irradia optimismo especialmente en su estribillo. ‘Sweet Confusion’ es uno de los temas más trabajados instrumentalmente con colaboraciones de Rober! (Atom Rhumba) con el Moog y su compañero en Los Tupper, Pepe, con el Farfisa. Más psicodélico y bucólico aún en ‘Kosmik Overdose’ con otros colgados como Julien Elsie o Iñigo Cabezafuego aportando su granito de arena. Cierra la cara A la espléndida ‘Carolyn’. Uno de los temas más especiales por la aportación a la guitarra de Darrell Bath, aunque también tenemos la pandereta de Gil Rose, ¡el piano de Rober! y los coros de Raúl Real.
En ‘Miracle Love’ me encanta el sonido que saca Manu de su órgano y los buenos riffs de guitarra, así como el ritmo pegadizo en general de la canción. Uno de mis temas favoritos es ‘The World Keeps Turning’, una preciosidad lenta y melódica con la buena slide guitar de Charlie Mysterio. Nos canta a los cambios recientes en el mundo pero también a los acaecidos en el mundo del pop-rock pero sin ponerse Abuelo Cebolleta. Finaliza el disco con ‘Ruby Ruby’ y de nuevo brillando también con el órgano. De nuevo desenfadado y de nuevo bordando un estribillo para un tema que también pudiera estar en un disco de su banda, Los Tupper. Este tema será toda una fiesta para acabar sus conciertos si es que puede presentarlo en directo. En cualquier caso, buena noticia, por cierto, ya ha anunciado el propio y siempre accesible Manu, que este no será el último disco que hará a su nombre.
Manu Gastado – New Rising Sun