Ya nos afilaron los dientes los londinenses unos meses atrás tras publicar un estupendo single en 7” con los dos primeros temas que abren el nuevo LP. Os dejaron un excelente sabor de boca tras haber transcurrido más de una década desde su buen LP, ”Welcome To The Mainstream”. La banda mantenía el sonido crudo y enérgico de la banda con base en el rockabilly, pero con destellos surf y algunos ramalazos y actitud punk. No extraña que haya medios que digan de ellos que son una banda que pudiera utilizar Tarantino en alguna de sus bandas sonoras.
El disco comienza con la cara B de su single de regreso. Una ‘Back In The Jungle’. Un tema pegadizo y gritón con riffs brutales que se acercan al rhythm and blues y al punk. Los primeros buenos punteos. Suenan más rockabilly en la cara A del single titulada ‘Heartache Overload’. Un pegadizo tema con pegadizo estribillo y con cierto aire a Eddie Cochran. ‘Lovin Up A Storm’ es una tormenta casi psychobilly en el más puro estilo The Cramps. Siguen cercanos a las tumbas con el rockabilly oscuro de ‘Graveyard’. La vena punk les sale en la más acelerada ‘Six Feet In The Ground’, entre otros momentos. La cara A se cierra con una ‘Dance To Keep From Crying’ para bailar y con otro pegadizo estribillo.
La B comienza también bien con la acelerada ‘Madman’ muy al estilo del debut de Stray Cats. Geniales riffs y ritmo y voz insinuantes realmente logrados en ‘Be My Witch’. Finalizan otra vez muy arriba con el ultra-pegadizo estribillo de ‘Dirty Robber’. Punteos veloces y otro más que posible single. Hay críticos que hablan de influencias que van de The Clash a John Lee Hooker y hay que destacar también la labor como ingeniero de sonido de un Ed Deegan que trabajo en el “Elephant” de The White Stripes. La verdad es que suenan rugosos y con gancho.